Las representaciones simplificadas agilizan el tiempo de regeneración, extracción y visualización, y permiten adaptar el entorno de trabajo para incluir solamente la información relevante en un momento dado.

Por ejemplo, es posible eliminar de un conjunto un subconjunto con el que no se está trabajando.

También se puede simplificar la geometría de una pieza, mediante la exclusión de algunas de sus funciones, o mediante la definición de una región de trabajo específica. En los planos, es posible crear vistas de representaciones simplificadas.